domingo, 14 de noviembre de 2010

SAHARA LIBRE!!

Porque creo en la libertad
Porque creo en los derechos humanos
Porque creo en la política
me niego a pensar que el Gobierno seguirá escondido, seguirá bailando la canción que Marruecos cante.



AHORA MÁS QUE NUNCA, ....SAHARA LIBERTAD!!!
POLISARIO VENCERÁ!!!!!!!!!!!

Desde aquí todo mi apoyo al pueblo saharaui

sábado, 11 de septiembre de 2010

EL GRAN SALTO

Ha pasado mucho tiempo desde que escribí mi primera y única entrada en el blog, no es que no haya escrito desde entonces, sino que todo lo que escribía me parecía demasiado personal como para subirlo a un sitio donde no lo puede leer nadie, o lo pueden leer muchísimas personas...

Mi vida ha cambiado mucho en estos dos meses y no es que le tema a los cambios, algunos son para bien pero me cuesta aceptarlo o reconocerlo...
Aunque sólo tenga 22 años, tenía mis ideas más o menos claras a corto plazo, sabía que quería hacer, sabía con quién lo quería hacer y donde lo quería hacer, pero de la noche a la mañana todo se derrumba. Y repito, no tengo miedo a los cambios, simplemente me da vértigo el pensar que todo ese esquema tan bien preparado y detallado que tenía previsto se me ha roto.
Me paro un segundo y pienso en todos esos consejos que la gente te da, siempre desde fuera y muy superficiales, porque tus amigos de verdad te conocen y saben que en ese momento deben escucharte y no soltar palabrería barata que han leído en agendas que tenían guardadas desde los 12 años.
El caso es que aún así intento autoconvencerme de que todo me va a ir bien. Ya soy periodista, he conseguido lo que me proponía, voy camino de empezar mi segunda carrera y convertirme en una buena corresponsal ¿Cómo puedo dejar que mi felicidad dependa de una persona? y la pena no es esa, no es dejar mi felicidad en manos de otra persona, sino ¿cómo puedo hacer esto yo?? Yo que tan independiente, fuerte y dura me creía.
El problema lo tenía yo.
Me veía en mi cuarto, sentada, sin tener ya ni la capacidad de llorar porque no podía, no estaba triste, estaba perdida, me daba miedo pensar que todo mi proyecto, por el que había luchado, se había ido a la basura, no podía creer que tantas cosas vividas quedasen en nada.
No era la primera vez que me pasaba, pero me dolía tanto o más que las anteriores, quizás porque en el fondo sabía que era última, que tenía que ser la última.
La música que antes simplemente cantaba y bailaba, ahora se aliaba en mi contra, todas las canciones de cualquier estilo, viniesen de la emisora que viniesen contaban mi historia.
No me apetecía escuchar lo bien que estaba la gente, lo divertida que era la vida o lo que me perdía por quedarme en casa. Sólo necesitaba tiempo.

Pero nunca llueve eternamente y aunque en un primer momento no quieres darte cuenta o no puedes, las cosas cambiaron. Estoy haciendo prácticas en una televisión comarcal que me ayudó mucho a no pensar en nada ni en nadie, sólo tenía que centrarme en hacer bien mi trabajo e intentar aprender lo máximo.
Conocí a mucha gente, gente que mereció y merece la pena.
También he aprendido a valorar lo que tengo, a mis amigas, no a mis conocidas, a mis amigas por las que daría todo y sé que ellas por mi también y por supuesto a mi familia.

He conseguido encauzar mi destino, mi futuro y ahora sólo depende mí y lo mejor es que ahora es de verdad. Ahora todo depende de mi...

viernes, 11 de junio de 2010

Tres asignaturas...

Tres asignaturas para terminar la carrera y dejar la facultad, ese lugar donde nos dicen que estamos para pensar, que nuestro trabajo llega a miles de personas, personas que en su mayoría son receptores pasivos de esta información.
Tres asignaturas para poder llamarme periodista, aunque quizás lo fuese mucho antes de entrar en la carrera, no?
Sólo tres asignaturas para mi primera cita con el mundo real... y debería estar contenta pero tengo un miedo aterrador. Miedo a olvidar que me llevo un día decir quiero ser periodista, miedo a olvidar mis principios, miedo a no ser un vehículo transmisor de información y convertirme en el altavoz de cualquier partido político, en definitiva, miedo a venderme.
El dinero no debe ser el motor del periodismo, ni obtener las mejores ventas el incentivo de los comunicadores. Me niego a ver la profesión como otra empresa más donde sólo y únicamente se busca la obtención del máximo beneficio. Y aquí me quiero detener, este punto me parece paradójico, todos los que entramos en la carrera (que no somos hijos de, ni nietros de...) sabemos que este trabajo necesita altas dosis de vocación porque es una labor mal pagada, que se desarrolla en condiciones muy precarias. a menudo objeto de crítica y donde no existen los horarios, por enumerar algunas de las ventajas de ser periodista. A pesar de todo seguimos e intentamos llegar a ser buenos comunicadores pensando, al menos en mi caso, que nos reportará mucho más de lo que dejo por dedicarme a ella. Pero todo lo que he aprendido en cuatro años de carrera es que mejor me hubiese decantado por Económicas, al menos sabría desde el minuto 0 a que me estoy dedicando. Nos imparten clases de "Empresa", "Publicidad", "Comunicación Empresarial e Institucional" vamos que nos enseñan a vender bien el producto, pero luego asignaturas como "Valores" se dan por optativas... sigo sin entender nada...
¿Dónde están los periodistas de antaño? ¿Dónde está la verdadera vocación?
No sé si seré otro número más engrosando las listas del paro u otra licenciada que trabaja para el gran McDonald, pero me gustaría pensar que si algún día consigo trabajar en un medio de comunicación seré fiel a mis principios, no me venderé e intentaré dar un verdadero servicio a la sociedad.

Espero sentirme orgullosa dentro de unos años cuando lea esto, significará que he pasado la prueba...